¿Has sentido la necesidad de ver tu teléfono celular porque
crees que sonó o vibró? ¿qué ocurre cuando te percatas de que ha sido falsa
alarma? pues de ser así podrías tener el Síndrome de la llamada Imaginaria.
En los últimos años las nuevas tecnologías han impactado en
gran medida a nivel mundial. Sus efectos en las personas son temas de estudio
que han demostrado que muchas veces el abuso de ellas pueden causar trastornos
psicológicos. Entre ellos el Síndrome de la llamada Imaginaria.
El médico Larry Rosen escribió en su libro iDisorder
que el 70% de los usuarios ha sufrido este síndrome. La razón
es simple, hacemos tanto uso del móvil que nuestro cerebro ha asociado
directamente el móvil con cualquier impulso que recibe.
Evidentemente no se necesita ningún tratamiento ni cuidado
para evitar este “síndrome” pero si nos hace ver cómo están influyendo
los nuevos teléfonos móviles a la mente de las personas. ¿Tú tienes
este síndrome?
Causa
La gran mayoría de usuarios de aparatos telefónicos móviles han tenido alguna vez la sensación de que una llamada está entrando en su celular, creyendo que su aparato vibra o suena. Esto sucede porque nuestro cerebro asocia el sonido o la vibración del teléfono móvil con cualquier impulso que recibe.
El uso ininterrumpido de los diferentes dispositivos electrónicos altera el funcionamiento del cerebro e impacta en el espectro psicológico causando nuevas patologías.
la causa que origina el síndrome de la llamada imaginaria está el factor de asociación. El cerebro ha empezado a asociar al teléfono móvil cualquier impulso que recibe, especialmente en personas con altos niveles de estrés por lo que alucina que su celular ha sonado o vibrado.
Efecto
Sin duda alguna los dispositivos electrónicos e Internet han revolucionado la forma en la que nos comunicamos, sin embargo la inmediatez en el tráfico de la información no es el único impacto que ha tenido en las sociedades ya que también está incidiendo en la conducta humana, según especialistas su uso constante afecta al individuo a nivel neuronal y psicológico.
De hecho, un estudio realizado por la consultora TechHive asegura que existen por lo menos, ocho nuevos trastornos psicológicos comunes entre los usuarios de Internet en todo el mundo.
Entre ellas están el 'Síndrome de la llamada imaginaria', 'nomofobia', 'cibermareo', 'depresión del Facebook', 'dependencia de Internet', 'dependencia de videojuegos en línea', cibercondría', y el 'efecto Google'.
Para tener una idea más clara de su efecto, la especialista en psicología, Emilia López Perla, explicó que "las redes sociales e Internet causan una modificación en la percepción de la realidad, los pensamientos y diálogos internos, por lo que la personalidad como en cualquier adicción o psicopatología cambia drásticamente, afectando también su entorno ya que esto genera un retroceso en las habilidades sociales", argumentó.
Lo que sucede a nivel neuronal según la psiquiatra de la Universidad de California, Gary Small, es que cuando el cerebro pasa más tiempo abocado a tareas relacionadas con la tecnología y menos tiempo expuesto a otras personas, se aleja de las habilidades sociales como la de interpretar las expresiones faciales durante alguna conversación.
Pruebas
Según el experto en adicciones digitales, Germán Burgoa, los afectados son aquellos que están en un permanente estado de vigilancia sobre su móvil. Esta ansiedad que sienten por recibir llamadas o mensajes deriva en vibraciones imaginarias.
Casos Comunes
“Casi siempre me pasa cuando estoy en el auto o voy caminando por la calle. Lo raro es que no siento una vibración sino varias, por eso saco mi celular de mi cartera para ver qué es y resulta que no hay llamadas ni mensajes”, contó una universitaria de 19 años, Daniela Gonzales, aunque, indica que, esto no le afecta.
Indagando más, Gonzales reveló que el medio que usa con mayor frecuencia para contactarse con su enamorado es la mensajería de texto, esta situación hace que ella esté al pendiente de su celular de rato en rato.
Según los especialistas, cuando una persona está a la espera de una llamada, es habitual que sienta vibraciones imaginarias en la pierna, en la cartera, en el bolsillo, o el sitio donde guarda su celular, y en este caso no es necesario un tratamiento médico -siempre y cuando la situación no se torne obsesiva o repetitiva -.
Sin embargo, estar al pendiente del móvil sin motivo alguno y además sentir que el mismo vibra, puede ser un factor de desconcentración y un atentado contra el estado de ánimo.
Según la psicoanalista Adriana Romero, si esta situación se intensifica se debe pedir ayuda a un profesional, ya que se estaría hablando de un trastorno obsesivo compulsivo y lo ideal sería determinar de dónde deriva esa ansiedad.
“Me pone muy ansiosa el mediodía porque sé que en ese horario me llama casi siempre mi madre que está en España pero cuando no lo hace, el resto del día me la paso viendo mi celular”, dice Adriana Vargas, una adolescente de 15 años. Ante este tipo de casos, los expertos recomiendan dedicar el tiempo a otro tipo de actividades que despejen la mente.
Indagando más, Gonzales reveló que el medio que usa con mayor frecuencia para contactarse con su enamorado es la mensajería de texto, esta situación hace que ella esté al pendiente de su celular de rato en rato.
Según los especialistas, cuando una persona está a la espera de una llamada, es habitual que sienta vibraciones imaginarias en la pierna, en la cartera, en el bolsillo, o el sitio donde guarda su celular, y en este caso no es necesario un tratamiento médico -siempre y cuando la situación no se torne obsesiva o repetitiva -.
Sin embargo, estar al pendiente del móvil sin motivo alguno y además sentir que el mismo vibra, puede ser un factor de desconcentración y un atentado contra el estado de ánimo.
Según la psicoanalista Adriana Romero, si esta situación se intensifica se debe pedir ayuda a un profesional, ya que se estaría hablando de un trastorno obsesivo compulsivo y lo ideal sería determinar de dónde deriva esa ansiedad.
“Me pone muy ansiosa el mediodía porque sé que en ese horario me llama casi siempre mi madre que está en España pero cuando no lo hace, el resto del día me la paso viendo mi celular”, dice Adriana Vargas, una adolescente de 15 años. Ante este tipo de casos, los expertos recomiendan dedicar el tiempo a otro tipo de actividades que despejen la mente.
Tratamientos
Un hospital de los Estados Unidos ofrece tratamiento médico
a pacientes que abusan de la tecnología. El programa dura diez días y se los
"desintoxica" del mundo digital. El psicólogo Kimberly Young, que
creó el tratamiento y es experto en el campo, relató a The Huffington Post que son más frecuentes las consultas sobre
este tipo de problemática.
Complicaciones
Para el sicólogo López, especialista en salud mental del
niño y el adolescente del centro de atención de la Universidad Ces en Sabaneta,
el comportamiento orientado a la revisión permanente del teléfono celular por
supuestas llamadas o mensajes fantasmas, se presenta en mayor medida entre la
población adolescente.
Este "siempre está buscando maneras de contactarse con
sus pares, buscan llenar un vacío, lograr un reconocimiento y aceptación de
grupo, y encuentra en estos aparatos la forma de poder contactar al otro sin la
necesidad de tener que hacer renuncias", plantea Daniel López
Pero aunque este comportamiento puede ser en muchos casos
molesto, especialmente cuando el dueño del teléfono interactúa con otras
personas y no es capaz de mantener un contacto real permanente en un
restaurante, una reunión, una conversación de café, sin estar mirando
frecuentemente la pantalla de su dispositivo, este -dice el especialista del
Politécnico Grancolombiano César Sierra - no se puede considerar como un
trastorno desde el punto de vista de la sicología.
Sin embargo, añade, lo que esta forma de actuar sí puede
hacer es prender una alarma acerca de problemas desde la sicología y la
neurología mucho más profundos de algunos de los individuos que lo manifiestan.
No sería extraño, por ejemplo, que por medio de actitudes
como esta se pudieran dar pasos para diagnósticos de trastornos como la
esquizofrenia.
Por su parte, el sicólogo Daniel López señala que desde la
mirada del profesional en esta rama, observar situaciones como las descritas en
algunos usuarios de los teléfonos celulares también puede significar la
manifestación de síntomas relacionados con patologías de ansiedad o trastornos
obsesivos y de dependencia. "Es como si estuviéramos hablando de una
adicción, como cuando se habla del alcoholismo", manifiesta el especialista.
Prevención
No es fatal y no estamos condenados a pasar el resto de
nuestras vidas en una institución mental o centro de rehabilitación. Lo que se
necesita es tener conciencia del tema y
equilibrar el uso de dispositivos (es decir, apagarlos de vez en cuando o
alejarte de ellos cuando lo estés usando demasiado).